
La equinácea es una planta medicinal originaria de Estados Unidos pero que ya se emplea en el resto del mundo tanto por sus beneficios como para decorar jardines, ya que estéticamente adornan mucho, siendo similar a una margarita pero con tonos rosados.
Como planta medicinal, el punto fuerte de la equinácea es su efecto antibiótico, siendo considerada uno de los mejores de los que se hayan en la naturaleza. Dependiendo de cómo se use esta planta se podrá para distintos tipos de cosas. Conozcamos los usos de la equinácea, el antibiótico natural:
Si su uso es interno, se preparará en modo de infusión o se tomará en forma de cápsula y tendrá los siguientes efectos para el organismo:
- Disminuye los síntomas de la gripe: la equinácea ayuda a reducir los síntomas tanto de la gripe como del resfriado común acelerando su curación.
- Antibiótico: como antibiótico natural que es la equinácea resulta muy útil para tratar infecciones, localizando el foco bacteriano y reduciéndolo, de esta forma, su ingesta pude ser especialmente útil para combatir sobre todo infecciones para los que no se puede aplicar remedios tópicos, como por ejemplo, las infecciones relacionadas con el sistema gástrico o las úlceras intestinales.
- Anticancerígeno: por un lado, se ha demostrado que la equinácea ayuda a eliminar células cancerosas. Y por otro, esta planta medicinal estimula el sistema inmune, por lo que es muy útil para aquellos que están sometidos a tratamientos de radioterapia o quimioterapia, los cuales disminuyes las defensas. Numerosos estudios avalan la equinácea como anticancerígena y útil en el proceso de curación.
- Sistema digestivo: esta planta medicinal aumenta la secreción de saliva, por lo que hace aumentar el apetito y también ayuda a eliminar bacterias acumuladas en la dentadura. Además, favorece la digestión y hace que ésta sea más fácil.
- Antiinflamatorio: la equinácea tiene efecto antiinflamatorio, ayudando con los problemas musculares y de los tendones. Así, se convierte en una planta muy útil para personas que tienen que hacer movimientos repetitivos con ciertos músculos diariamente como por ejemplo deportistas o personas que trabajen con el ordenador.
Si de la equinácea se hace un uso externo, ésta se deberá preparar en forma de tintura y se aplicará directamente en las zonas afectadas con heridas, úlceras, cortes, quemaduras, acné o eccema para acelerar su curación y evitar que se infecten –o para curar la infección si ya se tiene-. Si la afección se tiene en la boca o la garganta, se pueden hacer gárgaras diluyendo unas gotas de tintura en agua para ayudar a cerrar heridas bucales, llagas, así como para reducir la inflamación de las encías y las producidas por las anginas o faringitis, sin olvidarnos de que también el aparato bucodental puede beneficiarse de su propiedad bactericida.