
El jengibre se puede hallar en muchas islas en el Caribe, dónde puede florecer de manera espontánea, al contrario de las regiones cálidas cuando se cultiva. El país con la mayor producción del mundo es Jamaica, y le siguen China, India, Nepal, Tailandia, etc..
Gracias a la gran cantidad de propiedades que posee, la raíz es muy utilizada para tratar muchísimos males y la prevención de algunas enfermedades, enumeraremos a continuaciones algunas:
- Afecciones intestinales: Antiguamente el jengibre era utilizado en lo que a problemas digestivos se refiere, estimula el páncreas generando la producción de enzimas digestivas que nos hacen tener una mejor digestión, evitando así las flatulencias, gases, etc… Al mismo tiempo, su propiedad antibacteriana puede ser muy beneficiosa a la hora de cuidar nuestra flora intestinal, previniendo futuros problemas. la raíz actúa como antibiótico natural ayudando a nuestro cuerpo a combatir infecciones.
- Control de náuseas: Si ingerimos una pequeña porción de jengibre, ya sea en infusión o decocción, evitaremos marearnos en los largos viajes, y con esto combatiremos las ganas de vomitar. También podemos tomar un par de comprimidos a base de este tubérculo cuando viajemos en barco, autobús, coche, avión o tren, para prevenir los mareos ocasionados por el movimiento del vehículo.
- Quimioterapia: El jengibre se puede consumir para contrarrestar los efectos secundarios del tratamiento, se pueden realizar tisanas o mezclarlo con algunos alimentos para reducir los vómitos que esta terapia genere. Si está enfermo de cáncer no debe comer jengibre con el estómago vacío.
- Alitosis: Una antigua técnica es colocar un trozo de jengibre encurtido con vinagre (puede hallarse en tiendas orientales) para combatir el mal aliento y refrescar la boca cuando hayamos terminado de comer, otro beneficio es que hace que produzcas más saliva y evitar el problema de boca seca.
- Diarrea: Con sus propiedades antibacterianas, la raíz nos protege de problemas intestinales, aún con este resultado, nos causará un efecto positivo en nuestra flora intestinal generando el aumento de las bacterias beneficiosas, eliminando toxinas alimenticias que causen gastritis o diarreas. En el momento que eliminamos las bacterias y microorganismos parasitarios que sean perjudiciales para nuestra salud, evitamos las putrefacciones intestinales, que son responsables de las hinchazones abdominales, y con esto favoreceremos a la excreción y evitar el estreñimiento.
- Sistema circulatorio: La planta es un buen recurso para mejorar el riego sanguíneo, ayudando a la disolución de trombos en las arterias y la disminución de los niveles de colesterol presente en la sangre.
- Enfermedades cardíacas: La prevención de ataques cardíacos, trombosis, coágulos y las anginas pectorales están presentes cuando comemos jengibre junto con otros alimentos, en especial si es con cebolla y ajo.
- Tejidos heridos por congelación: Gracias al aumento de circulación, los efectos de este producto natural favorecen la regeneración de los tejidos afectados, el efecto es mayor si lo comemos junto con piña, cebolla o ajo.